Es princesa, trabaja 😮, tiene Instagram y se casa con un tequilero: tienes que conocer a Eugenie

Este es un año insólito para la familia real británica con dos bodas reales; Eugenie de York es, si cabe, más interesante.

Eugenie una de las nietas preferidas de la reina Isabel II, y aunque pertenece a una de las familias reales más populares del mundo, tanto ella como su hermana Beatrice se han mantenido en un perfil más bien bajo, dejándole los escándalos a su madre, Sarah Ferguson, duquesa de York, que se ha distinguido por ser una figura más que polémica desde la década de 1980 (así como un ocasional dolor de cabeza para la corona).

Una infancia casi como todas

Eugenie nació en el hospital Portland de Londres, el 23 de marzo de 1990. Es la segunda (y última) hija del príncipe Andrés, duque de York, y ' Fergie'. Su nombre completo es Eugenie Victoria Helena y fue la primera de las nietas de la reina Isabel II que no fue bautizada en una ceremonia privada.

En 1996, sus padres se divorciaron después de cuatro años de separación (fue famoso el escándalo, al aparecer en el Daily Mirror fotos de su madre asoleándose topless con el financiero John Bryan, que le chupaba el dedo gordo del pie), pero la relación de ambos con sus hijas ha sido normal: de hecho, en 2008 declaró en una entrevista al Daily Telegraph, con motivo de su mayoría de edad, que sus padres eran "la pareja de divorciados más felices que conozco" (esto en referencia a que pese a la disolución de su matrimonio, Andrés y Sarah viven bajo el mismo techo).

La princesa trabajadora

Eugenie no ha dado mucho de qué hablar en su vida personal, pero hay algo que la hace poco común entre los de la realeza: es una princesa que trabaja.

Desde 2012, cuando se graduó con títulos en literatura e historia del arte de la Universidad de Newcastle, no percibe ningún tipo de emolumento por parte de la corona - que mantiene a la familia real-, ni tampoco tiene obligaciones sociales (como su tía, la princesa Ana, o su prima política Kate Middleton, algo que Meghan sí tendrá que hacer) salvo con las caridades que ella misma elige. En 2013 tomó la decisión de dejar Inglaterra para irse a Nueva York y trabajar en la casa de subastas online Paddle8, en la que estuvo a cargo de coordinar las pujas a beneficio de diversas caridades. En 2015 volvió a Londres para ser directora asociada de la galería Ha & Wirth, un trabajo de tiempo completo que compagina con algunos deberes reales.

Aunque aún vive en un apartamento en un ala de casa de sus padres, ella cubre sus gastos personales, balancea su tarjeta y no solo eso: es la primera de la casa real que tiene una cuenta de Instagram (esto se debe a que ella no está ceñida por el mismo protocolo, que obligó a Meghan a cerrar su cuenta) y el día que la abrió, tenía ya 90,000 seguidores .

Eugenie y su prometido, Jack Brooksbank, se conocieron en 2010 en la estación de esquí suiza de Verbier, y empezaron a salir. Cuando el príncipe Harry celebró su 33 cumpleaños el año pasado, en una fiesta a la que ya acudió Meghan Markle como su novia, la pareja fue al castillo de Balmoral, en Escocia y, según los medios ingleses, fue entonces cuando habrían recibido la bendición de la reina para casarse, aunque su boda tuvo que ser pospuesta de su fecha original, ya que ambas bodas tendrán lugar en el mismo templo y el protocolo dicta que la boda del hijo de un heredero al trono tiene precedencia y Eugenie es solamente la sexta en la línea sucesoria.

¿Quién es el afortunado?

Nadie había oído hablar de Jack Brooksbank hasta antes de que se anunciara su compromiso con Eugenie, pero de acuerdo con un perfil publicado por la edición española de la revista Vanity Fair, el contrayente es todo un personaje.

Jack es jovial y con don de gentes, es miembro de la alta burguesía inglesa (de hecho, miembro de una familia dedicada a las finanzas desde el siglo XVIII), estudió en una de las escuelas más prestigiadas de Reino Unido, pero en vez de dedicarse al negocio familiar tradicional, se ha hecho una figura en el panorama de la vida nocturna londinense como el director de Mahiki. Su lujoso pub de temática polinesia está ubicado frente al glamoroso Hotel Ritz, en el exclusivo barrio de Mayfair, que cada noche recibe la visita de numerosas celebridades internacionales que visitan la capital británica como Paris Hilton, Beyoncé, Rihanna o Lady Gaga.

Jack también es embajador de Casamigos, la marca de tequila propiedad de George Clooney y le gustaría abrir su propia cadena de restaurantes.

De hecho, la buena mesa es algo que tienen en común Eugenie y su prometido: “A mis amigos y mi novio les encanta probar nuevos lugares”, dijo a la edición británica de la revista ¡Hola!. “Dos de mis restaurantes favoritos en Londres son Bocca di Lupo y el Paloma, un restaurante de especialidades españolas, en el Soho.

Las razones del optimismo

Cuando Eugenie tenía 12 años, sufrió de escoliosis, y desde entonces ha vivido con dos varillas de metal de 30 centímetros en la espalda. Al respecto dijo durante un discurso pronunciado el 8 de marzo, en el estadio Wembley, durante un evento del día internacional de la mujer: "Podría haber afectado a mi vida e impedirme hacer las cosas que amo. Pero eso me alentó a no desanimarme, a no perder la esperanza, a no renunciar, a vivir sin temor. Hoy me siento muy afortunada de poder trabajar y apoyar a otras jóvenes que están pasando por lo mismo, animarlas para que no dejen que el diagnóstico las gane, que vivan también sin miedos".

Sobre su estilo personal, Eugenie siempre ha sido muy abierta y, aunque sea royal, como al resto de las plebeyas le duelen los pies cuando usa tacones demasiado rato: “Para trabajar prefiero usar botas. He empezado a llevar tacones a medida que me hago mayor, pero son dolorosos al final del día. Yo veo a la gente llevando tacones en las películas y me pregunto, ‘¿cómo lo harán?". Sus marcas favoritas son, para sorpresa de muchos, Sandro y Maje, Zara, y Topshop, aunque también tiene algo de trendsetter: "Mis favoritos son una chaqueta bomber de encaje y unos botines al tobillo de Rag & Bone."

Una novia enamorada

Aunque al principio hubo la controversia de tener que posponer la boda por espacio de un mes, se ha fijado ya la fecha del viernes 12 de octubre de 2018, para el enlace en la capilla de San Jorge, en el palacio de Windsor. Eugenie habló por primera vez de su compromiso en 'The One Show', de la BBC, donde desveló cómo se le había declarado Jack. “Estábamos en un lago precioso, había una luz especial e incluso dije ‘este es un momento increíble’ y entonces él me lo preguntó, lo que fue sorprendente aunque hemos estado juntos durante siete años y nunca habíamos hablado de una boda ni nada. Fue el momento perfecto porque sabíamos que íbamos a terminar así, pero se dio de un modo natural”. Y añadió: “Estaba en una nube, llorando”. En la misma entrevista, la risueña princesa aseguró estar muy enamorada y que su vestido de novia sería algo hecho a medida y a su gusto: "Ni muy estrecho ni merengue. Creo que eso está pasado de moda".

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