Niña paseo un cocodrilo con correa por el parque y se hace viral: “es dulce por naturaleza”

El Love Park de Filadelfia fue el escenario perfecto para uno de los videos virales más curiosos de TikTok, y los protagonistas fueron una niña junto a su mascota, un reptil llamado Wally.

Pero, así como el caso del zoológico que exhibió un bolso de piel de cocodrilo, el famoso lagarto esconde un poderoso significado: se trata de un animal de apoyo certificado. Sigue leyendo para conocer su historia.

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Niña paseó con correa a su mascota, un lagarto llamado Wally

Wally en realidad es el animal de apoyo emocional de Joseph Henney, el abuelo de la pequeña que se hizo viral por pasear al reptil con correa en un parque de Filadelfia. Dicho lagarto, de 7 años y 5 pies y medio de largo, acompaña a la familia a todas partes, e incluso ve la televisión junto a ellos, por lo que está acostumbrado a convivir con humanos, como se muestra en la grabación.

En entrevista con 'The Washington Post' el 29 de agosto de 2022, Joseph explicó que Wally llegó a su vida en 2015, cuando uno de sus amigos llamó desde Florida para comentarle que había encontrado varios lagartos en un estanque.

Cabe mencionar que el abuelito de 69 años se dedica a las artesanías con madera, pero uno de sus pasatiempos es el activismo a favor de los derechos de los animales, especialmente de reptiles; de hecho, lleva 30 años de su vida ayudando a reubicar caimanes, serpientes e iguanas no deseados en santuarios de vida silvestre o zoológicos.

Wally cautivó a Joseph Henney y este lo adoptó como una mascota

Una vez que el abuelito tuvo bajo su cuidado al cocodrilo, de aquel entonces 14 meses de vida, notó comportamientos dóciles en él: no era agresivo, prefería comer cosas muertas y amaba las palomitas de maíz con queso.

Fue entonces que decidió dejarlo libre para deambular a su antojo, pues notó que Wally no tenía intenciones de lastimarlo e incluso disfrutaba de los mimos y caricias de los humanos.

Para 2017, Henney perdió a varios seres queridos y, para empeorar su situación, se le diagnosticó cáncer de próstata; afortunadamente su cocodrilo le ayudó a superar ese difícil momento en su vida y fue su doctor quien le sugirió que lo registrara como un animal de apoyo emocional.

El abuelito tomó el consejo y tras completar el formulario del sitio web de animales de servicio en Estados Unidos, recibió un certificado junto con un arnés y una correa. Ahora Wally renueva su permiso cada año y asiste a un sinnúmero de eventos.

Asimismo, el cocodrilo es la cara de la campaña en Go fund me ‘WallyGator and Friends Reptile Rescue’ ('Wally y sus amigos rescatistas de reptiles') en la que se busca recaudar dinero con el fin de seguir preservando la vida silvestre mientras Henney batalla una vez más contra el cáncer.