¿Por qué Voldemort no mató a Snape con una maldición? No usó Avada Kedavra por una razón
Voldemort es considerado como uno de los duelistas más peligrosos en el Universo de 'Harry Potter', debido a su maestría en el uso de maldiciones y otros hechizos asesinos.
Su favorita de todas era la famosa Avada Kedavra, una de las maldiciones imperdonables que mata al instante a cualquier persona, por lo que cualquiera que se atreva a usarla se gana una celda en Azkaban, la prisión de los magos.
Con ella, Voldemort mató a los padres de Harry, a su propio padre y a Alastor Moody, uno de los aurores más famosos de su generación, pero por algún motivo no tuvo el mismo trato con Snape.
'Harry Potter': ¿Por qué Voldemort no mató a Snape con una Avada Kedavra?
Durante la última parte de la saga, todo indicaba que Snape había mostrado sus verdaderas intenciones, matando a Dumbledore y sirviendo a Voldemort como un mortífago.
Pero en realidad todo fue parte del plan de Dumbledore para que el profesor de pociones fuera un agente doble y ayudara como pudiera a la causa de la Orden del Fénix y Harry Potter.
Una de las tareas más difíciles que el director de Hogwarts le asignó a Snape es asesinarlo, con el propósito de que Voldemort estuviera seguro de su lealtad.
Pero ese detalle tuvo un resultado inesperado, que cuando la Varita de Sauco (antes propiedad de Dumbledore) no le funcionó bien a Voldemort, el mago tenebroso pensara que ese problema se debía a que la lealtad de esa Reliquia de la Muerte se había transferido a Snape.
Para resolver ese inconveniente, 'El que no debe ser nombrado' decidió matar a su mortífago más poderoso. A diferencia de como lo hizo con sus enemigos (y algunos aliados), Voldemort no usó su famosa maldición asesina, sino que le encargó a Nagini la tarea de acabar con su seguidor más fiel.
Esto se debe a que si la lealtad de la Varita de Sauco le pertenecía a Snape, esta no querría lastimar a su verdadero amo y existía la posibilidad de que la maldición asesina le rebotara a él.
Pero lo que no sabía Voldemort, es que la lealtad de esa poderosa varita le perteneció a Malfoy, ya que fue él quien desarmó a Dumbledore en la Torre de Astronomía.
Al final Harry era el verdadero dueño de la Varita de Sauco, debido a que le quitó su varita a Draco en un enfrentamiento. Es por eso que el intento de Voldemort por matar a Potter con un Avada Kedavra volvió a fallar, provocando su derrota definitiva.